Nunca nada es suficiente para un Petrolhead de verdad. Y en esta oportunidad, 1685kg de pura ingeniería Japonesa desarrollada con un presupuesto sin límite y un sedoso v8 acompañado de una arcaíca caja de cambios han dejado su impronta en el garage. Esta es la review del Lexus LS 400.
Review LS 400
Dicen que a veces es necesario «romper con la monotonía» o quizás también (aunque no adhiero al significado que tiene hoy en día) «salir de la zona de confort«. Y siendo el año 2022, con los combustibles «por las nubes», una incertidumbre económica interesante e impuestos penalizando los coches y más los de «motores grandes» un buen día te levantas y piensas «me falta experimentar un v8″ y entonces te ves una tarde yendo en tren a comprar un coche que ni has visto pero que sabes que quieres.
Así como ya sabrás o te estás imaginando gracias a el ángulo de la foto, estamos hablando de 4.99 metros de largo por 1.83 de ancho y 1.43 de alto de pura ingeniería Japonesa. Pero no cualquiera, sino que estamos ante Toyota invirtiendo casi 1 billón de dólares en desarrollar uno de los mejores coches de la historia automotriz.
Review LS 400
Una mecánica dotada de una fiabilidad tal y como Toyota se ganó la fama en décadas anteriores a que fabricar lavadoras o tricilíndricos para fanboys fuera su principal fuente de ingresos. El motor de 8 cilindros y 4.0 litros de cilindrada tan famoso y reconocido: 1UZ-FE. Entregando 284 caballos de potencia y unos 350+ Nm de par. Unidad de potencia hoy en día se ve más en swaps que en tanques de guerra de origen, como lo es en el caso de los polacos de Nightride y su MX-5 NA de Drift!
La calidad de los interiores luego de 25 años y casi 280.000km es suprema. No sólo porque su estado de conversación después de haber tenido múltiples propietarios e historias que contar, sino porque aún a día de hoy la sensación que transmite estar dentro de ese habitáculo es lisa y llanamente única.
La review:
Lo bueno:
- Precios accesibles. Desde 3.000€ hasta el infinito «insert fanboy’s here».
- Consumos no tan disparatados: si haces autovías -para lo que está hecho este coche- te puedes poner fácilmente en 9L/100.
- Se puede asegurar como clásico por 180€ euros al año.
- Los recambios están a precios de un Renault Clio 1.6 de 2005.
- Imán de personas que tienen cultura automotriz.
- Confort de marcha extremo. No he viajado en nada mejor que este coche, es único.
Lo malo:
- Impuesto de circulación en el escalón más alto.
- Difícil aparcarlo en la vía pública debido a sus dimensiones.
- La bomba de dirección de casi todos los Lexus de la época suele sufrir pérdidas por sellos que llevan tiempo sin reemplazar, esto puede hacer que caiga líquido de dirección sobre el alternador (fallo muy conocido en la comunidad Lexus)
(Y hasta aquí, no he sido capaz de encontrarle más cosas malas la verdad…)